Por July De Sosa
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Para cerrar el mes en el que se conmemora a la mujer por el desarrollo importante que ha logrado con su entereza y valor, dentro de una sociedad machista; señalaré otra batalla que llegado el tiempo todas, tendremos que dar, y para esto el arma principal para gritar ¡victoria! será la salud mental, que ayude a tomarlo como un ciclo normal y no como una enfermedad, porque eso, también, forma parte del plan de Dios, para la mujer, me refiero a la menopausia; también conocida como el climaterio de la mujer, etapa en la que se deja de producir óvulos, que permitan que nuestro vientre lleve fruto, estado que genera gran incertidumbre entre las mujeres que están en esa etapa de su vida, y para aquellas que sufren alguno de sus síntomas, se vuelve necesario visitar a un profesional de la salud femenina para poder continuar con su vida normal.
La menopausia, requiere de que, llenemos nuestra mente con pensamientos positivos y nos revistamos de coraje y de buena voluntad, para esto las mujeres creyentes debemos aplicar la perspectiva de Dios escrita en la Biblia. El libro de Génesis, enseña que Dios creó todo con su palabra, y en las palabras, del hombre y de la mujer, puso el poder de la vida y de la muerte, usemos ese regalo en esta etapa para declarar bienestar en nuestro cuerpo, no hablemos palabras de dolor, de tristeza o de desánimo, sino más bien, apliquemos la fe declarando lo que esperamos sentir, y no, lo que estamos sintiendo, porque basta con prestar atención a lo que hablamos, para saber el porqué, de nuestro estado emocional, nuestras palabras pueden beneficiarnos o perjudicarnos, por esto conviene que en vez de pasar el día quejándonos de los cambios bruscos de temperatura corporal, cambios de humor, molestias vaginales y demás, síntomas, que podríamos o, que estemos sufriendo en este ciclo, debemos profetizarnos salud, y declarar que este tiempo pronto pasara “Dios dará gozo en lugar de ceniza”
Debemos estar expectantes de lo que el Señor nos enseñara acerca de su amor y del cuidado que tiene para con cada una de las que en él, esperamos y confiamos, porque nada puede separarnos de su amor. Sumado a esto también es importante buscar el tratamiento médico, adecuado para cada caso, conscientes de que los síntomas que pueden llegar a presentarse son a causa de un proceso natural del cuerpo femenino, por lo tanto, no pueden ser eliminados con medicamentos, pero si, minimizados y controlados. Considero que la estrategia a seguir en este tiempo es, hablar con Dios, y aplicar el manual de comportamiento bíblico, visitar a una ginecóloga, cuidar de lo que comemos, tomar mucha agua y ejercitar nuestro cuerpo. Recuerde la menopausia es una transición biológica, que marca el final de una etapa, pero también el comienzo de otra.
Concluyo, sugiriendo a la mujer que está en su climaterio, que haga participe a su esposo de lo que siente y que él, la apoye con paciencia, comprensión y amor. Porque, esta etapa está, dentro de los votos que se hicieron y aunque no es una enfermedad, para muchas, tal transición puede llegar hacer muy difícil, y el apoyo de su pareja sumado a la estrategia ya mencionada, también, le ayudará a minimizar el impacto de esa condición temporal.
“No desmayemos, aunque nuestro exterior se va desgastando, nuestro interior se renueva de día en día, esta leve tribulación momentánea produce en nosotras, excelente peso de gloria”